Costaleros de Sevilla, que no sevillanos

Hace ya tiempo que debería de haber subido esta entra entrada, pero por alguna extraña razón no lo había hecho.
Va dedicada a dos grandes tipos que han visto cumplidos uno de sus mayores sueños, este no es otro, que ser costalero en Sevilla
El primero de ellos Antonio toñito para nosotros y niño en Sevilla, cuantas fatigas ha tenido que pasar mi querido toñito asta verse debajo de una trabajadera, primero debajo del Señor de la Humildad y mas tarde debajo del que para mi es el Señor de Sevilla, N.P.Jesus de la Pasion, que grande es quien saliera de la gubia de Martinez Montañes, pero no se queda en la Semana Santa mi querido toñito, pues son varias las Glorias que el ha sacado, y como no, su Corpus con el Señor de la Cena el el paso caoba del Señor de la Humildad, paso este que debe de tener una cuadrilla impresionante según me cuenta.
A muchos de los que le apasiona el mundo del costal se quedan simplemente con el trabajo bien hecho por la cuadrilla el día de su Estación de penitencia, buena levantá, buena chicotá, pero hay mas mucho mas, para este costalero atrás quedan miles de kilómetros de carretera, noches sin dormir, nervios, cansancio y lágrimas, muchas lágrimas

El segundo no puede ser otro que mi AMIGO Javi, el chacina, como cariñosamente lo llaman en la ciudad del Guadalquivir, este buen peón y mejor persona corrió mejor suerte que mi AMIGO toñito, primera igualá en su vida y para dentro, y no en cualquier paso, que todos son buenos, este lo hizo en La Amargura, su Virgen su Madre, hermano de la Hermandad de la Amargura, desde hace años, se decidió a probar suerte, y aunque la buena conexión con el capataz y la cuadrilla fue excelente, bajo mi punto de vista fue la Santísima Virgen la que quería que el trabajara en ese paso, pero también ha tenido que pasar sus fatigas, como el anterior muchos kilómetros, nervios y lágrimas, y como todo no podían ser penurias, entre medias de estas quedan ya horas de tertulia cofrade, bonitas discusiones al amparo de unas cañitas bien frescas y un poquito de carne mechada, y como no, la satisfacción del trabajo bien hecho debajo de una trabajadera, que como he dicho siempre, solo lo saben y lo sienten los que van debajo

Ya puedo decir que tengo dos AMIGOS costaleros de Sevilla por la Gracia de Dios, que no sevillanos

Domingo de Ramos grande en Sevilla, trabajan el niño y el chacina