sábado, 21 de julio de 2007

Un Angel llamado...............

Después de un largo periodo sin escribir, hoy me decido a hacerlo, y lo peor de todo es que no sé cómo empezar.

Hace escasas fechas conocí a alguien a quien sólo he visto en persona una vez en mi vida, pero es tal la química que tengo con ella que parece que nos conociéramos de siempre.¨Viejos rockeros¨, ¿verdad, mi querida amiga?.

Pues bien, esta persona me anima a escribir en ésta-vuestra-mi madrugada. Y aquí estoy, dispuesto a rendirle un pequeño homenaje a esta persona tan especial.

Querida amiga: hace muy poquito era yo el que te animaba a saltar unas olas sobre un barreño en la terraza de tu casa en la mágica noche de San Juan, y ahora eres tú la que me animas a mí, la que me ha abierto las puertas de su fábrica, aunque ésta no las tenga; con la que he intercambiado opiniones y hasta canciones, que me ha ofrecido su ayuda sin yo pedírsela; la que me ha hecho descubrir una nueva ciudad bañada por el Duero y por el Tormes, entre Salamanca y Zamora, en medio de ninguna parte.

Bendito día aquel, en que nuestros amigos en común nos pusieron en contacto. Desde ese día vivo un poquito más feliz sabiendo que hay en el mundo personas como ella, y en este caso ni la belleza, que la tiene, ni el dinero, ni su forma de vestir importa. Lo único que importa es el corazón que tiene, el que debe de tener una gran persona como ella, amante de lo suyo, amiga de sus amigos.

Querida Berrendita, a menudo me pregunto, ¿dónde habrás estado metida todo este tiempo, que yo te he conocido ahora? y ya tengo unos cuantos años.

Querida Ana: soy de los que creo que todos tenemos un Angel de la guardia. Yo he descubierto uno en Salamora. Este no vuela, ni falta que le hace, pues cuida perfectamente de los suyos, de sus amigos. Un Angel que ríe, que llora, que también se sabe enfadar, que se entristece aunque le dure un suspiro. Pero aunque le dure un suspiro yo nunca te quiero ver triste, porque como ya te dije, no hay mayor tristeza que no verte sonreír.



Ana, muchas gracias por ser como eres.



Un abrazo.